Biografía

Nombre completo: Rafaela Escobar Polonio
Fecha y lugar de nacimiento: 4 de junio de 1950, Córdoba, España Residencia en la infancia: Espejo, Córdoba, España
Influencia familiar: Su madre, reconocida por su excepcional talento para el cante flamenco
Relación familiar en la música: Madre del guitarrista Aitor Escobar
Inicio de carrera artística: A los 60 años
Rafaela Escobar Polonio, nacida el 4 de junio de 1950 en Córdoba, es una destacada cantante de flamenco cuyo talento y pasión por el arte tienen raíces profundas en su familia. Su madre, quien cantaba con una voz angelical, fue su primera y más significativa influencia.
Durante su infancia, Rafaela vivió en Espejo, un pequeño pueblo cordobés, donde el flamenco formaba parte de la vida cotidiana. A los 11 años, su vida dio un giro cuando emigró al País Vasco. Aunque esta mudanza la alejó físicamente de su tierra natal, el flamenco siempre estuvo presente en su corazón.
Tras su regreso a Córdoba, su pasión por el flamenco resurgió con una fuerza inesperada, llevándola a iniciar su carrera artística a los 60 años. Este comienzo tardío no fue un obstáculo, sino una demostración de que el talento y la pasión no tienen edad.
Rafaela ha brillado en numerosos escenarios flamencos, actuando en prestigiosas peñas y festivales benéficos, incluyendo:
Peña Flamenca El Yunque
Peña Juan de Luisa
Peña Federico García Lorca
Casa Sevilla
Peña Curro de Utrera
Peña Soleá Apola
Peña El Lucero
Su voz, llena de sentimiento y autenticidad, ha conquistado a públicos diversos, dejando una marca indeleble en cada actuación. Rafaela se distingue por su capacidad para transmitir las emociones más profundas del flamenco, combinando tradición y una expresividad única.
Además de su trabajo como solista, Rafaela colabora estrechamente con su hijo, el guitarrista Aitor Escobar, participando en su proyecto musical. Esta colaboración familiar no solo fortalece su vínculo personal, sino que también enriquece el legado flamenco que comparten.
Hoy en día, Rafaela Escobar Polonio continúa cantando en peñas flamencas y colaborando en diversos proyectos artísticos, manteniendo viva la esencia del flamenco y compartiendo su arte con nuevas generaciones.